Page 111 - PRIMEROS AUXILIOS AVANZADOS
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Regulación del cuerpo - Llevar hormonas, agua, sales y otros compuestos necesarios para mantener balanceadas las funciones del
cuerpo.
Defensa - Protegernos contra las enfermedades causadas por organismos.
La sangre contiene glóbulos rojos, blancos y elementos involucrados en la coagulación sanguínea. Todos estos son llevados por un
líquido acuoso llamado
plasma.
El volumen de sangre en el cuerpo de un hombre adulto es de aproximadamente 6 litros. Cuando la hemorragia ocurre, la pérdida de
volumen es muy significativa. No sólo porque el cuerpo tiene una pérdida de células sanguíneas y elementos coagulantes sino
porque también tiene una pérdida de plasma y de volumen total. La pérdida de volumen puede ser muy importante dado que el
volumen de sangre debe mantenerse a un cierto nivel para una adecuada acción del corazón, flujo de la sangre e intercambio entre
la sangre y las células del cuerpo. El cuerpo tiene más sangre que la necesaria para producir la mínima circulación. Durante una
hemorragia, una vez que esta reserva se agota, la víctima experimenta un colapso del sistema circulatorio, seguido rápidamente de
la muerte.
RECUERDE: Un adulto normal tiene 6 litros de sangre como promedio; este volumen deberá mantenerse para permitir que el
corazón impulse adecuadamente, para que haya un buen flujo y para que exista intercambio entre la sangre y las células del cuerpo.
Volúmenes De Sangre y Hemorragias Graves Vasos Sanguíneos
La sangre sale del corazón por medio de las arterias. El intercambio con las células del cuerpo se realiza a través de las paredes
delgadas de los capilares. La sangre es llevada de nuevo al corazón por medio de las venas. Los latidos del corazón tienen su
mayor influencia en las arterias. La sangre en las arterias está a mayor presión y viaja con mayor rapidez que en las venas y los
capilares. Cuando la sangre llega a los capilares, la presión y la velocidad (o rapidez de flujo) se reducen enormemente y el latido del
corazón no genera pulsaciones prolongadas. La sangre se mueve a través de los capilares en un flujo constante llamado perfusión.